¿Qué es un año sabático?, pues se define como un período de tiempo en el cual una persona se toma un descanso voluntario de sus actividades laborales o académicas. 

¡En mis más de 25 años en el rubro de diseñadora de pasteles jamás me había tomado un “año sabático”, hasta que lo hice!!! Claro está que la decisión no fue fácil, pero era necesario porque el ritmo del trabajo, del día a día, de los compromisos con los clientes, con la familia, amigos, etc. hace que el tiempo vuele y no te permite realizar un examen profundo respecto a tu vida, a tu negocio  o a plantearte nuevos proyectos. 

Si bien es cierto podrías decir “eso lo puedo hacer un fin de semana” pues te diré que no es tan cierto, porque en verdad toma un buen tiempo el analizar muchas cosas. ¡No se hace en un fin de semana, créemelo!

En mi propia experiencia decidí parar literalmente un año (el tiempo depende de ti), y puedo decir con toda honestidad que durante este año pude ver detalles que no veía en la rutina de mi día a día.

El por fin descansar las horas que quería, hacer lo que quería sin la presión del trabajo me ayudó a replantear muchos aspectos de mi vida personal y familiar, y por supuesto a evaluar también mi lado profesional. 

Los ojos cansados del diario trabajar no dejan observar los diferentes lados de la historia con profundidad.  En mi caso pude ser observadora y estar del otro lado del negocio como una simple espectadora y cliente. Eso ayudo a ver también los vacíos que hoy en día existen en el rubro y que de hecho me dieron las pautas para nuevos proyectos.

Es importante tomarte un tiempo de descanso, el cual contribuirá además a que puedas recuperarte tanto del agotamiento físico como mental y renovarte para ir aún más allá de donde estas. Este tiempo ayudará a redefinirte o afianzarte como persona, como profesional y enfocarte en nuevos retos y por ende crecer aún más. Anímate a hacerlo, no sin antes prever todo para que funcione.

Jenny Amaya

Cake Designer