En épocas de bajas temperaturas, debemos prestar mayor atención al aspecto tanto de nuestros hogares como de los espacios comerciales. La luminosidad y confort siempre son los protagonistas y a falta de días cálidos, la iluminación se convierte en un factor fundamental en la decoración.
Un equilibrio correcto entre tipo y cantidad de luz hará posible intensificar el valor de los elementos decorativos. Y para ello, es esencial controlar tanto la luz natural como la artificial con el fin de iluminar correctamente los espacios o, atenuarlos en los casos necesarios.
Para los casos donde queramos iluminar más, una clave es utilizar el color blanco. Cualquier tonalidad de blanco transmite paz y tranquilidad, al mismo tiempo que aporta luminosidad a cualquier estancia. Además, este color siempre es tendencia y se puede combinar con cualquier tipo de mobiliario, estilo y tendencia decorativa.
Otra técnica es el uso de espejos, muy útil en la iluminación de los espacios. Los espejos son elementos decorativos muy potentes, ya que captan la luz y no solo la reflejan en toda la estancia, sino que también aumentan su proyección. Si se ubican enfrente de la entrada de luz, el sol hará el camino de ida y vuelta, y dará como resultado una mayor iluminación a los espacios pequeños para convertirlos en espacios más grandes.
Cubrir las ventanas con textiles o cortinas suele ser otro error común que tendemos a cometer. Si lo que queremos es aumentar la iluminación, es recomendable evitar este elemento decorativo para permitir que pase la mayor cantidad de luz natural posible. Sin embargo, en el caso de que fuera necesario el uso de cortinas, es preferible optar por colores claros para no saturar el ambiente.
Según el tipo de luz que utilicemos podemos crear diferentes tipos de ambientes. El uso de luz cálida ayuda a crear ambientes confortables y acogedores. Esta luz suele destinarse a espacios como dormitorios, salones, hoteles, etc.
En cambio, si utilizamos luces más neutras o blancas crearemos entornos más estimulantes como oficinas, despachos o clínicas. El tipo de luz que vemos siempre influye en nuestra percepción de los ambientes.